Para representar como han evolucionado los microprocesadores se suele tomar como ejemplo la trayectoria de Intel y de forma inevitable se termina hablando de uno de sus ingenieros fundadores Gordon Moore.
Si no fuera por que fue el primer micro cuya programación estudié, diría que la primera generación de procesadores Intel se remonta a la prehistoria, si, a primeros de los años 80 cuando IBM comercializaba PC's con el 8088 y el 8086. Hace ya más de 25 años, no es mucho tiempo... pero para un procesador de séptima generación (Pentium IV) esto es remontarse a la noche de los tiempos.
Las generaciones de Intel se han sucedido a gran velocidad, la segunda (80286) aparece en 1982 y dio paso a la tercera (80386) en 1985. En 1989 apareció el procesador 80486 que representó a la cuarta generación. Pero es la quinta la más famosa, en 1993 Intel presenta el Pentium y en 1995 se considera que con la llegada del Pentium II se inicia la sexta generación que terminó con el Pentium III.
Para llegar al día de hoy se ha tenido que producir una continua mejora en las técnicas de integración de transistores. Se habla ya de nanotecnología y parece que tocan los mismos límites de la materia.
Pero la más llamativo es que esta evolución fue pronosticada por Gordon Moore en 1965, es un pronóstico tan acertado que todo el mundo lo conoce como "La Ley de Moore".
Si no fuera por que fue el primer micro cuya programación estudié, diría que la primera generación de procesadores Intel se remonta a la prehistoria, si, a primeros de los años 80 cuando IBM comercializaba PC's con el 8088 y el 8086. Hace ya más de 25 años, no es mucho tiempo... pero para un procesador de séptima generación (Pentium IV) esto es remontarse a la noche de los tiempos.
Las generaciones de Intel se han sucedido a gran velocidad, la segunda (80286) aparece en 1982 y dio paso a la tercera (80386) en 1985. En 1989 apareció el procesador 80486 que representó a la cuarta generación. Pero es la quinta la más famosa, en 1993 Intel presenta el Pentium y en 1995 se considera que con la llegada del Pentium II se inicia la sexta generación que terminó con el Pentium III.
Para llegar al día de hoy se ha tenido que producir una continua mejora en las técnicas de integración de transistores. Se habla ya de nanotecnología y parece que tocan los mismos límites de la materia.
Pero la más llamativo es que esta evolución fue pronosticada por Gordon Moore en 1965, es un pronóstico tan acertado que todo el mundo lo conoce como "La Ley de Moore".
Santiago, me encanta la caza del tesoro que propones. El primer enlace al artículo de Baquia no funciona y quizá alguna cosa más habrá que actualizar, ya que en esto, la información no para de avanzar. Intentaré hacer esos ajustes para actualizarla.
ResponderEliminarMuchas gracias por todo el material que compartes, es estupendo.
Si, se quedan las cosas viejas.
ResponderEliminarAfortunadamente cobran nueva vida y se renuevan en otras manos. De modo que todo nuestro trabajo no se perderá como lágrimas en la lluvia. Es tiempo de compartir.
Y eso está bien, muy bien.