miércoles, 29 de diciembre de 2010

Cinco diferencias que distinguen 802.11n

Puede ser que estés empleando un router con un punto de acceso 802.11n integrado y no hayas notado una gran mejoría en el rendimiento de tu red inalámbrica. Con este nuevo estándar suele producirse cierta decepción inicial ya que todo el mundo espera velocidades de vértigo para una tecnología que promete romper con sus predecesoras, pero muchos olvidan que 802.11n debe garantizar la compatibilidad con las redes existentes. Es por esto último que la fiera permanece oculta.

Vamos a comentar cinco diferencias del estándar 802.11n que marcan un antes y un después en las redes inalámbricas de área local.

1.- Throughput
Venimos de redes WiFi 802.11a/g con enlaces a 54 Mbps que en realidad no garantizan tasas de tranferencias de datos efectivas (Throughput) de más de 22 Mbps. 802.11n mantiene enlaces a 300 Mbps con tasas para TCP de cerca de 200 Mbps, más del doble de lo que venimos empleando en redes cableadas Fast Ethernet. No esta nada mal. No obstante para que esto se cumpla se deben dar una serie de circunstancias favorables... Para empezar no ayuda mezclar clientes de diferentes tecnologías, lo ideal sería actualizarlos todos a 802.11n, esto es algo que caerá por su propio peso en los próximos años. Pero hay otros condicionantes...

2.- Número de antenas
Los puntos de acceso 802.11n llaman la atención por su mayor número de antenas. La explicación se encuentra en MIMO, una técnica que convierte el problema de la propagación de las ondas por diferentes trayectorias (multipath) en una ventaja. Piensa en cuando escuchas música en estéreo con tus auriculares, el canal de audio L y el canal R llegan por diferentes caminos y sin embargo tu cerebro se encarga de procesar esta información en una sóla melodía. En 802.11n se hace algo parecido, cada antena emite una ráfaga de datos distinta, el receptor los analiza con cada antena correspondiente y los combina en un solo mensaje. De nuevo esto es la teoría y es que muchos dispositivos móviles sólo tienen una antena con lo que no pueden beneficiarse de las ventajas MIMO.

3.- Doble Radio
Esta es otra diferencia importante. 802.11n puede funcionar en las bandas libres de 2,4 y 5 Ghz, recuerda que 802.11g/b lo hace en 2,4 Ghz y 802.11a en 5 Ghz y ambas son incompatibles entre sí.  Además sabemos que la primera banda está bastante ocupada. Por contra la banda de 5 Ghz está menos congestionada así que si conseguimos que todos los clientes tengan adaptadores de red con doble radio el rendimiento de  nuestra red aumenta notablemente.

4.- Seguridad
Es una de las mayores preocupaciones de los usuarios de las redes WiFi o al menos debería serlo. Para 802.11n el mínimo aceptable es WPA2/AES. Si un usuario se asocia al mismo punto de acceso con un nivel de seguridad inferior, por ejemplo: WEP , el punto de acceso 802.11n lo considera un dispositivo compatible y lo trata como tal, es decir, lo rebaja a 54 Mbps. Conclusión: volvemos al problema del primer punto.

5.- Voracidad de ancho de banda
Para finalizar un clásico: La ley de Shannon.
La capacidad de un canal de comunicaciones es proporcional al ancho de banda, dobla el ancho de banda y podrás transmitir el doble de datos (con SNR constante, claro).  802.11a/g necesitan canales no solapados de 20 Mhz de ancho de banda, 802.11n puede unir dos y trabajar a 40 Mhz. Pero cuidado, en la saturada banda de 2,4 Ghz ocupar dos canales genera un problema más que una ventaja.

Son sólo cinco aspectos, hay más, pero es suficiente como para para darse cuenta de que instalar y mantener redes inalámbricas 802.11n grantizando sus máximas prestaciones no es nada fácil.

2 comentarios:

  1. Muy interesante su artículo sobre una tecnología emergente que mucha gente espera. Aún así, ¿usted piensa que en la actualidad las compañías deberían instalar APs en edificios haciendo uso de este estándar, o el coste asociado es todavía demasiado alto?

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  2. Considerar 802.11n en un despliegue inalámbrico actual ya no es una opción. Sinceramente creo que no hay otro camino. En nuestro centro estamos migrando hacia esta tecnología con AP's de doble radio y efectivamente el coste es bastante superior.

    Lo cierto es que cada curso los usuarios con dispositivos móviles es mayor y los servicios que se demandan en red cada vez más exigentes, a la cabeza los multimedia. Así que no hay duda de que hay que actualizar gradualmente de 802.11b/g a 802.11a/b/g/n

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